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sábado, 19 de abril de 2014

Mayra Alejandra: "No quiero lágrimas cuando me vaya"


La actriz decía que no moriría, que solo iría a su "encuentro con Jesucristo"

YOLIMER OBELMEJÍAS | EL UNIVERSAL

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  • "Hermano, no quiero lágrimas en la familia cuando me vaya de este plano porque yo no voy a morir, simplemente me voy al encuentro con mi señor Jesucristo", le dijo Mayra Alejandra a Juan Carlos Barry la última vez que habló con él.

    Una cosa es recordarlo y otra poder decirlo menos de 24 horas después de que se apagara su luz. La actriz luchó contra el cáncer desde 2010, enfermedad que finalmente le arrebató la vida el Jueves Santo.

    Barry destaca que, a pesar de su padecimiento, "Mayra Alejandra siempre demostró fortaleza espiritual y se mantuvo aferrada a Jesucristo".

    A Mayra Alejandra lo artístico le vino de familia. Hija de la escritora Ligia Lezama y del humorista Charles Barry, a los 20 años le contó a su mamá que quería trabajar en Valentina y así fue como obtuvo su primer papel en televisión.

    Su rostro combinaba un aire de dulzura con una poderosa sensualidad poco vista en las intérpretes venezolanas. "Hicimos Carmen la que contaba 16 años (1978), que funcionó muy bien, gustó muchísimo, pero cuando a mí me preguntan cuál es tu mejor película yo pienso siempre en Manon (1986)... Ella y yo tuvimos escenas muy fuertes", recuerda Miguel Ángel Landa.

    "Cuando llegaba al estudio o al pasillo le decía: 'Mayra A' y ella me respondía: '¿Ah?'. Era como un chiste entre nosotros (...). Además de ser una gran actriz, era una gran amiga, cumplida, dedicada a su trabajo. Jamás hubo que esperar por ella, jamás hubo que repetir porque no se sabía la letra, siempre estaba alegre, contenta. Era una mujer que transpiraba alegría. Era una emoción verla", dice.

    La actriz también será recordada por La hija de Juana Crespo y Leonela, el éxito de Delia Fiallo que protagonizó con Carlos Olivier. Sus restos fueron cremados ayer en una ceremonia en El Cementerio del Este.



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