La actriz cubana Beatriz Valdés, quien protagonizó en Venezuela telenovelas como Amantes de Luna llena, Guerra de mujeres y La mujer perfecta, y quien está residenciada desde hace más de un año en la ciudad de Miami, donde se ha dedicado sobre todo al teatro, asegura que siempre regresará a la televisión. "Es el medio que más conozco. Me gusta estar allí, me gusta mi gremio, mis compañeros y me gustan, incluso, sus defectos. Aunque resulte un poco ilusa, no pierdo las esperanzas de que la televisión sea tomada en serio".
EL UNIVERSAL
Acerca de su mudanza a Miami, Valdés contó al diario Nuevo Herald: "Me fui de Cuba porque me enamoré y me fui de Venezuela porque me asusté. Vine a Miami con un trabajo que no tenía en Caracas y con un sueldo que no ganaría nunca más allá. Me reencontré con mi familia, con los cubanos de antaño y con la mitad de Venezuela que está aquí. Todos los días me veo y siento que tengo que empezar de nuevo, pero no puedo mirar atrás. Ya no tengo tiempo para el desaliento, así que voy amaestrando "la fiera" y ocultando mis miedos. Esta es una ciudad dura, pero con tantas ganas, que provoca seguir intentándolo.
Valdés, que actualmente monta la pieza Brujas, en la que dirige a las actrices Elizabeth Gutiérrez, Ana Karina Manco, Karla Monroig, Roxana García y Angélica Castro, dice que Venezuela no es un capítulo cerrado. "Soy una mujer dividida entre el mar y la montaña. Justo en el centro, entre ellos, estoy yo, sobre un pantano nuevo, que tengo que aprender a amar. Venezuela me duele todos los días y extraño mi casa y mi gente. No me fui de Venezuela, así como nunca me fui de Cuba y con esas dos anclas sigo andando hasta que la vida indique. No es difícil... solo es la historia de mi vida.
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